Las fascias y la disfunción miofascial
Las limitaciones del sistema miofascial (fascias) producen dolor y frenan y limitan la recuperación de la función corporal, algo que generalmente se suele olvidar en la cadena de tratamientos efectuados por los fisioterapeutas encargados de restaurar la función y de aliviar el dolor.
La fascia es un tejido fuerte que rodea todos los órganos de forma tridimensional permitiendo que se mantengan en la posición y funcionamiento correcto. El recorrido de la fascia es continuo; por este motivo, cualquier cambio estructural de la fascia en una determinada parte del cuerpo producirá restricciones en las partes distales. Este cambio estructural de la fascia llamado “disfunción miofascial” puede producirse por una lesión, accidente, una caída, una intervención quirúrgica, una menstruación dolorosa o una postura inadecuada.
La disfunción miofascial no tratada correctamente y a tiempo, conduce al paciente a un círculo vicioso de tensión y espasmo muscular, es decir, produce una disfunción orgánica y dolor.
¿Qué es la inducción miofascial?
La inducción miofascial es una técnica de evaluación y de tratamiento tridimensional de los movimientos, mediante presiones sostenidas sobre el sistema fascial se eliminan sus restricciones. Este tratamiento está basado en el estudio científico y de excelente calidad del profesor Andrzej Pilat (ver vídeo de Andrzej Pilat).
Indicaciones del tratamiento de inducción miofascial
La inducción miofascial puede ser de gran utilidad en el tratamiento de fibromialgias, dolores musculares y dolores articulares.
Este tipo de terapia es también el indicado para las patologías fasciales que se tratan desde la fisioterapia.
¿En qué consiste la terapia de fascias?
Después del diagnóstico en la consulta y tras comprobar la idoneidad del tratamiento, se aplica el método de inducción miofascial mediante presiones sostenidas para eliminar las restricciones fasciales que presente la persona que viene a tratarse.
Duración de las sesiones y tratamientos de inducción miofascial
La duración de cada sesión es de 50 minutos.
La duración del tratamiento dependerá de las restricciones miofasciales que presente la persona a tratarse. Se aconseja valoración y diagnostico previamente para su mejor indicación.
Recomendaciones durante el tratamiento
Se recomienda beber entre un litro y medio y dos litros de agua diarios durante el tratamiento miofascial.